Mejoran 31 Asadas de Puntarenas

Personeros de la CNE y de la Asada valoran los trabajos que se realizaron en la Chamba.

Redacción

La Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE) ha realizado mejoras a 31 Asociaciones Administradoras de los Sistemas de Acueductos y Alcantarillados Comunales en Costa Rica (Asadas) en el último año.

La colaboración de la CNE impactó a 100 poblaciones de la vertiente del Pacífico, a las cuales se les facilitó los insumos para mejorar los sistemas o bien instalar nuevos acueductos con el fin de llevar agua de calidad a casi 55 mil personas de estas comunidades.

El proyecto que se gestó desde el 2022, permitió que se enlazaran otras instituciones con las asociaciones para resolver los problemas de abastecimiento que presentaban desde años atrás.

Alejandro Picado, presidente de la CNE comenta que, “este proyecto es un claro ejemplo de cómo la unión permite generar soluciones donde miles de personas ahora tendrán acceso a agua potable, especialmente a las comunidades indígenas que no contaban con ella y ahora su vida ha cambiado”.

Lo favorable del proyecto según Picado, es que asociaciones con mayor experiencia brindaron apoyo técnico a otras Asadas para que el líquido pudiera llegar a los abonados.

Tubos de PVC; tubería de polietileno; pastillas de hipoclorito de calcio; tanques de almacenamiento de agua; cloradores; hidrómetros y sus cajas de protección; pegamento; válvulas de compuerta; rollos de polietileno; adaptadores y conectores de PVC; cemento hidráulico para construcción general; concreto seco; bloques de concreto y horas de excavación con maquinaria, entre otros, fueron parte de los materiales y servicios que se entregó a las Asadas.

Los ¢722 millones que se necesitaron para suplir las necesidades fueron dados por la Junta de Desarrollo Regional de la Zona Sur (Judesur). Algunas comunidades impactadas fueron Chamba, San Vicente, Potrero Grande, Piedra Convento, La Amistad, El Carmen y Llano Bonito. El proyecto contó con la colaboración de las municipalidades de Golfito, Buenos Aires, Coto Brus y Osa como unidades ejecutoras, así como del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA).

Un ejemplo de enlace de esfuerzos se dio en el territorio indígena de Chamba, donde varias personas de la comunidad se organizaron en la construcción del acueducto.

Michael Bárteles del Comité de Acueducto Rural de Chamba señaló que, para su construcción, fue necesario “un proceso de organización y de colaboración comunal… rompiendo brechas, porque hay partes donde hay pendientes muy profundas y por ahí pasamos, aunque fuera guindando. La idea de nosotros era que el agua saliera y lo logramos, gracias a Dios”.

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