Autoridades israelíes y palestinas se culpan mutuamente de la tragedia en el hospital en la Franja de Gaza. No se ha determinado con certeza en quién recae la culpabilidad del hecho
Israel aceptó el pedido del Presidente Biden de permitir el ingreso de ayuda humanitaria a la zona en conflicto
Redacción
Una explosión devastadora que tuvo lugar el martes en el Hospital Ahli Arab de la ciudad de Gaza ha dejado una estela de destrucción y víctimas mortales, según los informes y los videos publicados en las redes sociales por testigos del incidente. El Ministerio de Salud de Gaza informó que se contabilizan cientos de personas fallecidas, mientras que los equipos de emergencia se esfuerzan por recoger los cuerpos y restos humanos para su identificación.
«Todavía hay muchos cadáveres que no han sido recuperados», señaló Amir Ahmed, paramédico de la Media Luna Roja Palestina en Gaza. “Hay demasiados cuerpos”. Ahmed describió la posibilidad de que, dadas las terribles circunstancias, algunos cuerpos sean enterrados en una fosa común durante un funeral programado para este miércoles.
La atribución de la masacre ha generado controversia, ya que las autoridades palestinas acusaron a un ataque aéreo israelí como la causa, mientras que las Fuerzas de Defensa de Israel afirmaron que fue el resultado de un cohete errante disparado por una facción armada palestina en Gaza. Hasta el momento, no ha sido posible verificar independientemente las versiones de ambas partes y la causa exacta de la explosión y el número de víctimas sigue sin estar claro.
Entre las víctimas del hospital, gestionado por la Diócesis Episcopal de Jerusalén, se encuentran numerosas mujeres y niños, según informó Ashraf al-Qudra, portavoz del Ministerio de Salud en Gaza. Las instalaciones médicas de otro hospital de Gaza se han visto abrumadas por la cantidad de pacientes, a menudo tratados en pasillos y en condiciones precarias, incluida la falta de anestesia.
La inmensa magnitud de la tragedia, con cientos de víctimas y lesiones complejas, ha superado la capacidad de los equipos médicos y las ambulancias, lo que genera una amenaza adicional para aquellos heridos. La falta de suministros médicos, agua y electricidad agrava aún más la situación. Desde la semana pasada, Israel ha impuesto un bloqueo total a Gaza, lo que ha llevado a la escasez de alimentos, agua, electricidad y combustible.
La intensidad de los ataques aéreos israelíes en respuesta a un ataque sorpresa de Hamás ha provocado que aproximadamente la mitad de la población de Gaza, que supera los dos millones de palestinos, huya de sus hogares, según Naciones Unidas. Muchos de ellos se refugieraon en los pasillos y patios de los hospitales, creyendo que estarían más seguros.
Los heridos en la explosión del martes han sido trasladados a otros hospitales de Gaza, que ya estaban desbordados después de 11 días de ataques aéreos israelíes contra la franja costera.
Israel permite la entrada de ayuda humanitaria a Gaza en respuesta a pedido de Biden
Por otra parte, este miércoles Israel anunció que permitirá a Egipto entregar una cantidad limitada de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, en respuesta a una solicitud del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, durante su reunión con el primer ministro Benjamin Netanyahu.
La oficina de Netanyahu aseguró que Israel «no frustrará» la entrega de alimentos, agua y medicinas, siempre y cuando estén destinados a civiles en el sur de la Franja de Gaza y no tengan como destinatarios a la organización terrorista Hamás.
La declaración no especifica si se autorizará el ingreso del tan necesario combustible.
La comunidad internacional sigue observando con preocupación la escalada de violencia en la región y las llamadas a un alto el fuego se multiplica. Mientras tanto, en Gaza, las familias desconsoladas buscan a sus seres queridos entre los cuerpos expuestos, en busca de un rayo de esperanza en medio de la devastación.
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